jueves, 4 de junio de 2009

Cuando nos falla el olvido

Creo que este poema no necesita una introducción así que ahí va:
Olvido fallido.

Cuando las voces se van apagando
y no quedan sino soledades mudas,
el recuerdo difuso de tus labios
me invade y a mis oídos inunda
con tu voz grabada pero sin ser tuya.

Y si el cielo deja su azul de siempre
y se torna rojo todo el horizonte,
tus ojos se me aparecen inconformes
por que parezco feliz contigo ausente.

Cuando el cielo decide soltar su llanto
y nos ahoga con su amable tristeza,
siento de nuevo tus lagrimas saltando
de tus ojos al abismo entre tu cabeza
y la mía, que quería estar más cerca.

Es más terrible cuando el asfalto hierve
derritiendo todos mis pensamientos,
ya que queda solitario en mi mente
el reflejo de tu generoso cuerpo
que antes descongelaba mis adentros.

Pero en las noches realmente sufro,
pues la terca memoria traicionera
me hace ver en el cielo nocturno
tu hermosa y rebelde corona negra
que antes sujetaba entre mis dedos.

Entonces la razón me dice susurrando
que deje de engañarme por un momento
y permita al corazón hacerme ver claro
que por mas que hiera a mi fiel orgullo
tu amor aun me sigue siendo necesario…

2 comentarios:

kuino!!! dijo...

mmmmmm aceptar eorgullo es un paso muy bueno...muy lindo me gusto..para quien es? jejejeje ntc! si maldita memoriaa!!! pero kui!! somos humanitos un poco débiles...te quiera jefazo!!

Atenas dijo...

jummm tendria que detenerme un poco mas a revisar este en especial jajaja pero vamos son las 4:16 am quisa cuando vuelva d ela escuela y ya haya dormido aunque sea una hora... aun asi te continuo leyendo